Mi perro come “cacas”… ¿cómo puedo evitarlo?

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La ingestión de heces, es una conducta que nos trae de cabeza a todos los propietarios. Es una guerra continua, con muchas batallas perdidas. Nuestra compañera y etóloga Lorena Díez  nos enseña a  comprender mejor dicha conducta y a conocer las herramientas que tenemos para evitarla.

La coprofagia es la conducta que hace referencia al consumo de heces propias o de otros animales. Es una conducta normal, en algunas circunstancias, como cuando las hembras ingieren las heces de sus cachorros en el entorno del nido.

Este problema es más común en cachorros y según algunos autores, más frecuente en determinadas razas. Los factores predisponentes son:

–        Cachorros criados en ambientes empobrecidos, por aburrimiento comienzan a jugar con sus propias heces y acaban ingiriéndolas.

–        Cachorros procedentes de tiendas de animales, se alojan en lugares tan pequeños que adquieren el hábito de eliminar sus heces del entorno.

La coprofagia puede ser la consecuencia de un problema orgánico como:

–        Deficiencias en vitaminas y minerales.

–        Insuficiencia pancreática exocrina.

–        Síndrome de malabsorción intestinal.

–        Parasitosis (coccidiosis).

Por ello es muy importante que el animal que presente dicha conducta sea examinado por un veterinario que descarte patologías orgánicas.

En la mayoría de los casos, la coprofagia es causa de problemas comportamentales como:

–        Conducta exploratoria en cachorros.

–        Poca estimulación y ambiente empobrecido (sin juguetes).

–        Comportamiento de demanda de atención, cada vez que el perro se acerca a las heces consigue la atención del propietario y después un premio por soltar la “caca”.

–        Estrés motivado por; permanecer mucho tiempo solo, confinamiento excesivo, estancia en residencia, problemas de ansiedad.

–        Heces palatables, las heces de caballo y gato son las exquisiteces de muchos perros. La ingestión de heces de caballo no suele ocasionar alteraciones digestivas, se compone de materia vegetal y no transmite parásitos al perro. Sin embargo, las heces de gato suponen un problema al ser la forma de contagio de muchos parásitos.

¿Qué podemos hacer para minimizar esta conducta?

No hay un tratamiento específico e infalible. Es un comportamiento difícil de extinguir porque es una conducta autoreforzante, por muy repugnante que nos resulte a las personas a los perros les gustan las heces. El objetivo es llevar a cabo varias recomendaciones para reducir al máximo la coprofagia.

Si ingiere sus propias heces…

–        Reducir la probabilidad de ingestión de heces, retirando de inmediato.

–        Minimizar el tiempo en que el cachorro esta sólo y supervisar al cachorro la mayor parte del tiempo para poder corregir la conducta “in fraganti”.

–        Hacer las heces menos “apetitosas” utilizando sustancias aversivas.

  1. Cambiar el olor de las heces, con trocitos de piña o calabacín rallado hace que las heces tengan un olor no muy agradable.
  2. Administrar suplementos que reduzcan la palatabilidad (sabor) de las heces.
  3. Poner pimienta blanca molida, cuando el perro olfatee las heces le provocará estornudos.

–        Eliminar el castigo: el perro/cachorro puede asociar las heces con la llegada del propietario a casa y el castigo. Por lo tanto aprende a “eliminar” este estímulo señal que asocia con castigo. La corrección solo es efectiva si se aplica justo en el momento de la acción, posteriormente aunque el animal presente señales de sumisión son la respuesta a nuestro  enfado no al arrepentimiento.

–        Enriquecimiento ambiental: la falta de estimulación puede ser la causa o contribuir al problema. La calidad y el nivel de estimulación que recibe un perro es esencial para disminuir la aparición de conductas indeseables. Debemos proporcionar paseos frecuentes y de la duración adecuada a tu mascota, hay que dedicar todos los días un rato de juego y mientras el perro se queda solo debe disponer de algún tipo de distracción (juguetes interactivos, Kong, etc.)

–        Dieta: se recomienda repartir la ración en dos tomas, para evitar periodos prolongados de ayuno. Ser estrictos con los horarios de las comidas.

 Si ingiere heces de otros animales…

  1. El perro debería ir atado siempre para permitirnos supervisarle  y corregirle cuando intenta ingerir heces y premiarle inmediatamente el cambio de actitud.
  2. Si el perro va suelto puede ser eficaz los collares de aerosoles o citronella  (nunca collares de descarga eléctrica), que permita la corrección a distancia cuando el perro se acerca a la materia fecal.

Lo ideal es mantener al perro bajo control durante todo el paseo, evitando así el acercamiento, olfateo y posterior ingestión de las heces. La mayoría de los perros aprende rápidamente que si su propietario está lejos o distraído (móvil) él puede dar rienda suelta a sus apetencias y en estos casos la corrección siempre llegará tarde y será inefectiva, solo servirá para deteriorar el vínculo con nuestro perro.

En la realidad todos disfrutamos de caminar con nuestros perros, si el paseo deja de ser relajante para nosotros porque tenemos que supervisar al perro en todo momento o para nuestro perro porque siempre va atado, entonces muchos pensaréis que no merece la pena.

Por tanto, debemos aplicar las correcciones en el momento oportuno y tomar las medidas comentadas para minimizar al máximo la conducta. La coprofagia es un comportamiento natural y extinguirlo completamente, no es factible. Hemos de encontrar el equilibrio entre batallas perdidas y ganadas e intentar que la balanza se incline a nuestro favor.

Es importante mantener a nuestros perros correctamente desparasitados y consultar a nuestro veterinario cuando la conducta sea incontrolable y excesiva para que chequee al animal y descarte enfermedades que puedan ser la causa de coprofagia.

Lorena Díez Pereira

Lda. Veterinaria.  GpCertAnBeh.

Experta en comportamiento canino y etología clínica canina y felina.

Título de adiestrador profesional y técnico de modificación de conducta.

 

Espero que nuestros consejos te hayan resultado útiles. Si necesitas más información no dudes en ponerte en contacto con nosotros. También puedes visitar la web  www.etocanes.com donde encontrrás consejos sobre educación canina.

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